Otra función que gana popularidad es la gestión de notificaciones. Con un wearable, es posible recibir alertas de llamadas, mensajes o eventos del calendario sin necesidad de consultar el móvil constantemente. Esta característica aporta comodidad y ayuda a mantener la atención en las tareas sin perder información relevante.
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Los dispositivos wearables también incluyen herramientas para el bienestar, como recordatorios para moverse tras periodos de sedentarismo o ejercicios de respiración guiada para reducir el estrés. Estos apoyos pueden contribuir a mejorar hábitos saludables sin complicaciones.
Finalmente, la integración con aplicaciones móviles permite personalizar la experiencia y almacenar datos históricos. Así, es posible seguir la evolución en distintos ámbitos y ajustar objetivos. Aunque no sustituyen la opinión profesional en materia de salud, estos dispositivos facilitan una relación más consciente con el cuerpo y el día a día.
